lunes, 20 de julio de 2020

Tarta de ruibarbo

El ruibarbo no es una fruta y tampoco es una verdura, podríamos decir que tiene aspecto de verdura y sabor de fruta.
Solo son comestibles los tallos, sus hojas son tóxicas porque tienen gran cantidad de ácido oxálico.
Se recolecta en primavera y no es fácil de conseguir en los mercados.
Yo he tenido la suerte que donde resido ahora temporalmente se da bien en la huerta y una amiga me ha regalado unos tallos con los que hice mermelada y esta tarta.
El ruibarbo se puede congelar y así tendremos esta fruta-verdura durante gran parte del año.



Ingredientes


  • 4 ó 5 tallos de ruibarbo ( 300 gr. )
  • 150 gr. de azúcar

Para la crema

  • 2 huevos
  • 140 gr. de azúcar
  • 200 ml. de nata
  • 1 cucharada de azúcar vainillado
  • 2 cucharadas de maicena
  • 1 cucharada de harina
  • 1 lámina de masa brisa

Preparación

Lavamos y cortamos los tallos del ruibarbo en rodajitas.
Ponemos en un bol con 150 gramos de azúcar y dejamos macerar durante al menos una hora a temperatura ambiente.
Para hacer la crema batimos los huevos con el azúcar hasta que blanqueen.
Añadimos la nata, el azúcar vainillado, la maicena y la harina y batimos hasta integrar.
Ponemos la masa brisa en un molde redondo de quiche, cubriendo fondo y paredes.
Pinchamos el fondo varias veces con un tenedor.
Vertemos la crema y horneamos, en horno precalentado a 180°, durante 10 minutos.
Pasado ese tiempo sacamos del horno y añadimos el ruibarbo macerado con el jugo que haya soltado y horneamos durante 30-35 minutos, hasta que veamos que la superficie está bien dorada.
Sacamos y enfriamos sobre una rejilla. 
Demoldamos cuando se haya enfriado.



Y una pizca de cariño.
Xiana.

No hay comentarios:

Publicar un comentario